domingo, 27 de diciembre de 2020

¿Qué es la personalidad demandante?

  

 

Personalidad demandante.

 

La definimos como una persona que continuamente está pidiendo atención, amor, cariño, afecto y exclusividad. El perfil de estas personas es que por mucho que se les da, parece que nada las satisface o la satisfacción es momentánea y temporal. 

Suelen ser personas con un nivel de frustración alto, es decir, cualquier demora en recibir lo que demandan ya sienten frustración tanto con la pareja, los amigos y la familia. 

Es un perfil muy inestable de personalidad pues por mas que le dan, nunca siente recibir todo lo que demanda y cuanto mas piden, mas demanda. Muestran mucha inseguridad en las relaciones interpersonales y tienen tendencia a someterse a las relaciones en cuanto sienten que son queridas o son el foco de atención de los otros. 

No toleran los límites, ni tampoco los tiempos, es decir todo tiene que ser cuando piden y lo quieren recibir inmediatamente, de ahí que la espera, les produce mucha frustración y angustia.

Suelen ser personas que explotan emocionalmente cuando sienten que no reciben lo que piden, así mismo son tremendamente celosas y siempre tienen que tener un grado de exclusividad para poder estar tranquilos.

 

Si analizamos psicoanalíticamente este perfil de personalidad, observamos que tiene su origen en la infancia, en la relación con los padres y con los hermanos. El niño demandante suele ser un niño al cual, los padres han acostumbrado a darle todo de manera inmediata y cuando deja de ser así, es cuando se les genera el sentimiento de frustración, que lo toleran bastante mal por su manera de ser inmadura.

El perfil del demandante también se origina en la relación con los hermanos. Cuando observa que un hermano es atendido antes que él, se le desencadena los celos, la frustración y un malestar manifiesto que tienden a exteriorizarlo en forma de rencor, llanto, rabia e ira.

Podemos decir que la personalidad demandante no ha madurado y lo que realmente demanda es amor, es decir, quieren ser y ocupar siempre el foco de atención y del amor de los otros: pareja, familia, amigos, compañeros de trabajo. 

Demandan continuamente un amor, una atención y un cariño pero infantil. Ser el objeto de prioridad de las personas, que sería lo mismo que desplazar a los demás la antigua relación infantil que tuvo con su familia, especialmente con los padres. Por lo tanto es una demanda de amor inconsciente infantil pero demanda de amor y atención de las figuras paternas. Para solucionarlo, necesitan acudir a terapia psicoanalítica.