domingo, 14 de mayo de 2017
domingo, 7 de mayo de 2017
¿PORQUÉ FRACASA UN RÉGIMEN DE ADELGAZAMIENTO?
El 100% de los fracasos
de los regímenes tiene un componente mental. Una persona que va a llevar a cabo
un programa para adelgazar acompañado de una actividad deportiva, debe trabajar
simultáneamente el aspecto psicológico de su obesidad y su futuro adelgazamiento.
Adelgazar supone no solo bajar de peso, sino que supone abandonar la imagen de
un cuerpo donde la persona con sobrepeso lleva viviendo a veces hasta años. Quiere
esto decir que la persona cuando adelgaza no se reconoce ni en la imagen ni en
el nuevo cuerpo. Según refieren las personas que adelgazan, “no terminan de
verse”, “no se reconocen”, “ven alguien que no son ellos”, siendo esta la causa
por la cual vuelven a engordar, para poder reconocerse otra vez como lo que
eran antes de adelgazar. Seria largo de explicar las causas inconscientes que
hacen que una persona que modifica su físico lo sienta como una pérdida de
identidad: la identidad con la que lleva toda una vida. De ahí que las
depresiones que acontecen tras adelgazar no es tanto por los kilos perdidos
sino por la identidad perdida, que se vive como una pérdida de uno mismo, como
cuando perdemos a alguien querido. La persona con sobrepeso ha perdido al obeso
o a la obesa que era, lo que produce una especie de duelo y tristeza, a veces
tan insoportable que vuelven a “resucitar” al obeso que eran simplemente para
no sentir la muerte del que siempre fueron. Si de vivir se trata, morir carece
de sentido. Se puede trabajar el sentimiento de pena ante la pérdida de peso de
manera que la perdida no se viva como una muerte sino como el renacer a una
nueva vida.
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