lunes, 31 de agosto de 2009

LA CULPA PUEDE HACER ENFERMAR

El hombre vive entre el mundo exterior y su mundo interior. Alguna vez te habrás preguntado qué es lo que puede enfermar la mente de una persona. La respuesta es debida a los conflictos que se originan entre las exigencias del mundo interior y el mundo exterior. Todos tenemos una parte dentro de nosotros mismos que se denomina el inconsciente. Es la parte donde se hallan los sentimientos, los recuerdos, las pasiones y los deseos. Nuestra manera de ser y de vivir, está regulada por nuestra moral y por nuestra ética. Todos tenemos conciencia de los conceptos de lo que es bueno y malo. Sin embargo, el hombre es capaz de entrar en conflicto consigo mismo porque a veces lo que desea o quiere choca con su moral o la moral del mundo. Los conflictos con la moral producen el llamado sentimiento de culpabilidad. Es de los sentimientos mas misteriosos y más complejo de estudiar, ya que su funcionamiento, regula nuestra vida. Todas y cada una de nuestras acciones son analizadas por nuestra moral. La culpa nace cuando las personas tienen, sienten o desean actos contrarios a su moral. Esta culpa solo se calma mediante algún castigo. Por eso, muchos de los síntomas mentales guardan relación con la aparición de esta culpa, que solo se calma o se aminora sintiendo un enérgico castigo. La culpa es capaz de llevar a una persona a buscar el castigo o la penitencia. Muchas parejas infieles se hacen descubrir por sus parejas y de esta manera forzar el abandono o la ruptura. Ciertos pensamientos agresivos se vuelven contra uno mismo y la agresión que se quería hacer al otro, recae sobre uno mismo. Desear el mal a otros puede acabar haciendo que el mal se cierne sobre uno. Y esto no se debe a fuerza sobrenaturales. Es el mismo hombre el que se castiga y el que se perdona.

miércoles, 26 de agosto de 2009

CRISIS EN LA PAREJA


Es complejo definir qué es una pareja. Podríamos decir que todo aquello que les une, forma parte de lo que es una pareja. Lo cierto es que para que dos personas se junten, tiene que existir el deseo y/o el amor. Puede haber amor sin deseo y deseo sin amor. Cualquier combinación puede posibilitar una pareja. También les puede unir los proyectos, el trabajo, los hijos. Todo aquello que genere compromiso, sería del orden de la pareja. Lo que origina una pareja tiene que ver con modelos de identificación familiares. De manera inconsciente, se busca en la pareja todo aquello que nos recuerda a los padres, hermanos, tíos. Es por esto, lo importancia que la familia tiene a la hora de la elección de pareja e incluso, el destino de una pareja también tiene que ver con nuestros destinos afectivos dentro de la familia. Las crisis suelen venir por muchas circunstancias que se han de analizar con precisión. Nunca nada es lo que parece. La falta de comunicación, de deseo o de amor, guarda relación con ciertos pactos inconscientes que se van consolidando en la pareja con los años. Hasta el dolor, puede ser un pacto dentro de la pareja. ¿Existen parejas que tienen tendencias sadomasoquistas? Cada vez más, según demuestra el psicoanálisis. Del dolor y del desprecio, se puede hacer hasta una forma de vivir en pareja. NO es lo mismo tener una crisis y acudir a un especialista que tener una crisis y no buscar ayuda. En el primer caso, hay una intención de salir adelante. Cuando no se busca soluciones, es porque se quiere terminar con la pareja. Hasta el amor o el deseo muerto, se pueden resucitar. Solo hay que querer. El psicoanálisis es la terapia que cura el mayor porcentaje de crisis de pareja. Nueve de cada diez parejas resuelven la crisis y el uno por ciento, se separan pero amigablemente, sin venganza ni odio. Por norma general, las parejas se acaban separando con odio, con mucho odio y culpa.

jueves, 20 de agosto de 2009

LA MUERTE SUBITA EN DEPORTISTAS

Los deportistas de élite, están sometidos a una sobrecarga emocional que a veces pasa factura. Me pregunto ¿por qué no se le da tanta importancia al entrenamiento psíquico y solo a lo físico? ERROR MUY GRAVE. Muchas lesiones- no sólo las musculares, sino también las cardiacas- son manifestación de intensas cargas emocionales que el deportista no sabe gestionar. ¿Alguien de los equipos de fútbol sabe gestionar las emociones de los jugadores? ¿Son los psicólogos las personas adecuadas para este tipo de gestiones o debería tenerse dentro de los equipos a verdaderos especialistas con experiencia demostrada en el campo de la gestión emocional? Como Director de un Departamento de Clínica Médica, estudio junto con otros médicos el campo de la medicina psicosomática (síntomas físicos provocados por la mente) aplicado también al deporte. Nos hemos planteado la hipótesis sobre la muerte de Jarke y Puerta: ambos canteranos, los dos iban a ser padres y con gran responsabilidad dentro de sus equipos. ¿Se le pasó a alguien por la cabeza que estos hombres pudieron estar sometidos a una sobrecarga emocional? Los médicos sabemos que el corazón es un órgano diana donde se somatizan fácilmente las emociones. Cuantas veces hemos visto en urgencias venir a personas que tras discutir con su pareja, sufrieron una angina de pecho, un infarto, se les reactivo una úlcera gástrica o tuvieron una crisis asmática. Hemos visto grande jugadores llegar a grandes equipo y no funcionaron: se lesionaron, se enfermaron, no sintonizaron con el grupo, fracasaron. Gestión de las emociones- trabajar la parte inconsciente de la personalidad, no la parte consciente- es lo que debe incluirse en el deporte. Por que sino, vamos a ver muchas más lesiones, trastornos grupales e incluso muertes súbitas.

domingo, 9 de agosto de 2009

SEXUALIDAD Y SEXO

Por sexualidad definimos el modo en que el hombre se relaciona con sus semejantes. Dentro de la sexualidad se engloba el sexo, la genitalidad. Sin embargo, no son la misma cosa, ya que los trastornos sexuales, son consecuencias de los problemas con la sexualidad.
El hombre, es deseo. Dentro del deseo, se hallan todas sus variantes. Para hablar, escuchar, relacionarse, trabajar, salir de paseo, escribir, estudiar, etc… tiene que existir el deseo de hacer todas esas cosas. Cuando una persona tiene dificultad para hacer actividades en su vida, podemos hablar de la existencia de un trastorno con el deseo y de la sexualidad. El trastorno con el deseo, no significa que el deseo desaparezca, simplemente se desplaza, se transforma, se transmuta pero nunca desaparece, porque es una consecuencia del ser vivo: ser seres deseantes. Cuando el deseo desaparece, acontece la muerte de la persona. En el caso de la depresión, la persona pierde el deseo por vivir, situación harto peligrosa que la puede llevar a la melancolía y al suicidio.
Las relaciones humanas, se establece a través de la palabra, de las conversaciones. NO hay otra manera de establecer una relación entre dos personas, si no es mediante el diálogo. Podemos decir que toda aquella persona que tiene dificultades para hablar – lo que llamamos la timidez, la inhibición, la vergüenza, el pudor- tiene dificultades con su sexualidad. Y cuando se tiene dificultades para hablar, para comunicarse, el sexo, queda afectado. Cuando en una pareja no hay comunicación, difícilmente el sexo funciona. Entonces, los llamados trastornos sexuales – impotencia, eyaculación precoz, frigidez, falta de orgasmo, dolor al coito, etc…- guardan relación con la sexualidad comunicativa de las personas. El psicoanálisis, es un método terapéutico que viene a mejorar los problemas de hablar y expresarse. Esto permite que has relaciones entre las personas, sean más fluidas, mejorando ciertos aspectos de la sexualidad.

miércoles, 5 de agosto de 2009

¿ TIENES UN HIJO PROBLEMATICO ?

Nos encontramos en un momento social muy delicado para los hijos. Las drogas son fáciles de conseguir- alcohol, marihuana, otros- para los jóvenes, porque estamos viviendo en una cultura destructiva. Es más fácil que un hijo rebelde o agresivo, caiga en el uso de drogas que uno que no lo es. Generalmente, estos hijos suelen tener un cambio de actitud en el comienzo de la adolescencia y edad adulta, mostrándose con una actitud más rebelde y desobediente hacia la figura de los padres. Todo hijo problemático, tiene un patrón de personalidad mal constituida, de manera que debe revisarse los aspectos de la infancia y los problemas familiares que pueden haber influido en el desarrollo de dicho trastorno de la personalidad. Es frecuente ver, que los hijos a veces son la tapadera de los problemas de los padres, los cuales, en vez de resolverlos, los tapan, desviando su problema hacia un hijo problemático. Tengo ejemplos que pueden horrorizar, como el de una madre, que le conseguía la droga a su hijo e incluso ella misma se la pinchaba. En ningún momento, ella puso de su parte para que el hijo se curara. Esto le permitía tener centrada su atención en su hijo y no en los problemas que tenía con su marido. Y como este ejemplo hay muchos más. Luego están los hijos cuyos padres han sido muy permisivos. Esto a la larga también acaba trayendo problemas. La cuestión es si debemos llevar a un hijo problemático a recibir un tratamiento. La respuesta es sí, porque con el tiempo, el problema seguirá desarrollándose. Y no hagan como hacen algunos padres: llevarlos para que mediquen a sus hijos, para que se queden atontados y así no den problemas, porque a la corta, acabará siendo un problema mucho mayor. Es decir, para que un hijo problemático se cure, los padres necesitan también apoyo psicológico y cuando los padres no quieren recibirlo, es que no quieren que se cure el hijo.

domingo, 2 de agosto de 2009

EL DOLOR DE LOS CELOS

Sentimiento muy humano el de los celos, pero posiblemente, uno de los más dolorosos. Los celos, así como la tristeza, el amor, forman parte del carácter de cualquier persona. Todo el mundo los tiene y los padece. Tiene que ver con otros sentimientos: el de la propiedad y el de la pérdida de una persona querida. Pueden aparecer dentro de la pareja, entre hermanos y amigos. Frente al sentimiento de haber perdido la atención o el cariño de la persona frente a la que se experimenta afecto, el sujeto siente tristeza, malestar, angustia, dolor difícil de cuantificar, desesperanza, frustración e incluso puede aparecer sentimiento de venganza, frente al rival y hacia la persona querida. Existe otra variante a parte de los celos normales, que son los llamados celos proyectados. Por normal general, lo padecen personas de moral elevada. Frente al sentimiento de querer o desear a otra persona, suelen entrar en conflicto consigo mismos y solucionan su sentimiento de culpabilidad culpando a la persona querida de sus celos. Es el típico hombre o mujer que desea a otra persona y como no acepta ser él o ella quien desea, acusa de su deseada infidelidad a la otra persona.
Los celos, tienen relación con el desarrollo del niño dentro de la estructura familiar. El origen de los celos aparece cuando el niño toma conciencia que no está solo en el mundo y que los primeros privilegios que disfruta en exclusividad, más tarde tendrá que compartirlos con la figura del padre y de otros hermanos. Es como hemos dicho, un sentimiento que puede rozar la paranoia, sobre todo en personas que tienen fuerte dependencia emocional hacia otras personas. A su vez, los sujetos celosos, sufren y mucho. Porque es tal el grado de propiedad que creen tener sobre la otra persona, que les puede convertir en persona peligrosas, siendo capaces de agredir a la parte amada frente a la posibilidad de perderla. Existe un tratamiento para los celos y es el psicoanálisis, porque pueden invadir muchas áreas de la vida y deteriorarla. Las personas celosas, son capaces de abandonar su trabajo, sus actividades y condicionar la vida de la otra persona para no sentir celos, lo cual lleva a un grado de claustrofobia que acaba deteriorando la pareja, la amistad o las relaciones familiares.