miércoles, 29 de julio de 2009

LA FALTA DE AUTOESTIMA E INSEGURIDAD

La autoestima, también llamada confianza, es una característica de la personalidad, necesaria para autoafirmarse en la vida. La falta de confianza en sí mismo, puede ser en las relaciones sociales, en lo laboral, en las relaciones de pareja y en lo familiar. Una persona insegura a parte de dudar de sí misma, suele tener un perfil característico de baja autoestima, sintiéndose poco importante, carente de interés para lo demás, con dudas sobre su aspecto físico, se consideran menos inteligentes que los demás, etc. El origen de este sentimiento, debemos buscarlos en las etapas iniciales del desarrollo infantil. Por norma general, el sentimiento de inferioridad siempre es con respecto a algo o alguien, es decir, la persona insegura, de manera inconsciente, siempre se está comparando con alguien de su infancia. Es muy normal que los padres, elogien las actitudes sobresalientes de los hijos y los comparen entre ellos. Esto suelen ser el desencadenante de celos entre hermanos o del niño hacia el padre, o la madre, hacia algún primo, vecino que lejos de fortalecer la seguridad, la disminuye. Digamos que la persona insegura tiene en su inconsciente un rival al cual no puede ganar, y esto le hace desistir, pensando que él nunca será como la persona con la que se comparó en su tierna infancia o adolescencia. En los niños, es muy típico que la comparación sea con el padre y en las niñas con la madre. Dentro de esta rivalidad infantil, cuando el niño no acepta o no tolera al rival de su comparación, suele entrar en un periodo, que podríamos definirlo como de agresividad contenida, y tras esa máscara de baja autoestima, lo que se esconde es una agresividad o rabia que le hace disminuir sus posibilidades de superación. También no deja de ser un modo de llamar la atención. Mientras un hermano llama la atención por su inteligencia, otro la llama por su ignorancia. En el fondo, son formas de relacionarse entre la familia. Y decir que la inseguridad en el adulto o adolescente, no deja de ser más que una proyección de su inseguridad infantil. Tiene solución.

lunes, 27 de julio de 2009

¿ ERES INESTABLE EMOCIONALMENTE EN PAREJA ?

Existe un patrón de personalidad, tanto en hombres como en mujeres, que se caracteriza por inestabilidad emocional en las relaciones interpersonales, falta de confianza en la imagen propia, en la afectividad y con notable impulsividad cuando las cosas no van bien. Estas personas, cuando se enamoran, hacen frenéticos esfuerzos para evitar que les abandonen. Cuando perciben que pueden ser abandonados, son capaces de cambiar su imagen y su comportamiento hacia la otra persona. Experimentan intensos temores a ser abandonados, incluso en períodos cortos de tiempo o cuando se producen cambios bruscos de planes. Este temor a ser abandonados, está relacionado con la intolerancia a estar solos y a la necesidad de sentirse acompañados, por su seguridad personal, radica en sentirse queridos. Ante el miedo a ser abandonados, son capaces de llegar al chantaje emocional, incluso a comportamientos suicidas. Este tipo de personas, en cuanto conocen a alguien, desde el primer momento idealizan a la persona, le ofrecen todo y comparten hasta los más íntimos detalles. Cuando no sienten que les prestan atención, son capaces de hacer situaciones dramáticas y acusar a la otra persona de ser mala. Este tipo de personas, son capaces de cambiar de imagen, de trabajo, de planes, de estudio y hasta de casa con tal de no perder a la persona de la que impulsivamente está enamorado. Suelen abandonar incluso su manera de pensar para no contradecir a la otra persona. Viven con ansiedad todo, se entregan al cien por cien al segundo día, siendo capaces de hacer cualquier acto de riesgo para mantenerse junto a la persona que quieren.
Este tipo de personalidad, entra dentro de los patrones inmaduros. Es decir, estas personas, no han logrado madurar y son como niños pequeños que necesitan de alguien cercano para sentirse protegidos. Sufren mucho y cuando se enamoran rompen toda relación con el mundo para entregarse totalmente a la persona de la que se han enamorado. Este patrón se les repite continuamente pareja tras pareja. Este sufrimiento, justifica que busquen ayuda. No sirven el uso de la medicación, ni las terapias conductuales, porque el origen de su problema tiene que ver con las relaciones vividas durante la infancia con la familia. Son personas que tuvieron mucha dependencia familiar, lo que le lleva a buscar un patrón parecido al de su infancia o al que les hubiera gustado tener. La solución es una terapia psicoanalítica.

jueves, 23 de julio de 2009

EL TRASTORNO OBSESIVO COMPULSIVO ( TOC ) SI TIENE CURACIÓN

La característica esencial del TOC es la presencia de obsesiones o compulsiones de carácter recurrente, lo suficientemente graves como para provocar pérdidas de tiempo significativas, acusando un deterioro de sus actividades normales y sintiendo un malestar muy significativo. Las obsesiones son ideas, pensamientos, impulsos o imágenes de carácter persistente, que la persona considera intrusas y que provocan malestar, ansiedad y angustia. Suelen tener miedo a contaminarse de una enfermedad por contagio, tienen dudas repetitivas, compulsión a ordenar las cosas, a contar, impulsos agresivos y/o asesinos, imágenes sexuales, ganas de blasfemar, obsesión con el dinero etc…
Actualmente, el psicoanálisis cura nueve de cada diez pacientes con TOC. El resto, son personas, que en el fondo NO QUIEREN CURARSE, porque le sacan algún tipo de partido a su enfermedad. El PSICOANALISIS es 100% efectivo en personas QUE REALMENTE SE QUIEREN CURAR. La causa del TOC TIENE SU ORIGEN EN LA INFANCIA, y el psicoanálisis trabaja la infancia y la relación del paciente con su familia, con la que siempre tiene algún tipo de problema. Los tratamientos psicológicos y psiquiátricos curan en menos proporción y suelen recaer de nuevo, porque no trabajan los aspectos inconscientes e infantiles de la personalidad del paciente. El psicoanálisis es una terapia efectiva, con garantías de curación por el número tan alto de pacientes curados. Si has estado en muchos tratamientos y no has probado el psicoanálisis, comprobarás que desde la primera sesión, ya sientes un alivio. El obsesivo está dentro de un laberinto, dando vueltas y vueltas sin saber dónde está la salida. El psicoanálisis encuentra la salida de ese laberinto.

domingo, 19 de julio de 2009

LA IMPORTANCIA DE CONOCERSE A SI MISMO

Si durante la escolaridad, hubíera recibido conocimientos sobre el funcionamiento de la mentE, posíblemente mi vida de adolescente y jóven adulto me hubiera resultado más fácil. Quiero decir que hasta que no conocí el psicoanálisis con 19 años, el conocimiento sobre sí mismo, era cero. Recuerdo, que no comprendía muchas de mis reacciones, tampoco entendía por qué me equivocaba con los amigos y no veía muy claro hacia donde orientar mi futuro personal, teniendo en cuenta que provenía de una familia de clase muy obrera. Todo eran dudas, incertidumbre y angustia, porque me sentía perdido como un naúfrago en medio del mar, ala deriva. Recuerdo con 18 años, que mi madre enfermó y el negocio de mi padre se hundió. Yo me tuve que poner a trabajar para ayudar a la familia porque no llegaba el dinero ni para comer. Había un ambiente de tristeza que nadie sabía cómo afrontar. Recuerdo haber sido siempre un chico muy vital, jovial y energético, pero aquella situación pudo conmigo y sentí que no podía más con el sentimiento de impotencia que embargaba mi vida. Consulté a una profesora psicóloga que me daba clases durante mi etapa de Formación Profesional, porque yo notaba que en sus clases, ella sabía muchas cosas de cómo funcionaba la mente de las personas. Con mucho malestar, la dije que se me hacía muy pesada la vida que estaba viviendo y que no sabía como crear para mí otro destino. Ella me preguntó si tenía algún dinerillo, le dije que sí, que tenía ahorrado 20.000 pesetas. Me dijo: te voy a poner en contacto con una psicoanalista de la Escuela de Psicoanálisis Grupo Cero. Llegué a la primera entrevista muy entusiasmado y después de conversar me sentí muy aliviado, porque en tan solo treinta minutos me habían enseñado una manera más positiva de ver mi situación. Allí comenzó mi viaje hacia mí mismo, que fue el comienzo de mi psicoanálisis. Empecé a comprender el por qué de mis miedos, obsesiones, fobias, tristeza, alegrías, inseguridades, incluso las cuestiones de mi naciente sexualidad, se fueron aclarando. Era tanto lo que me daba el psicoanálisis que a todos mis amigos les mandé psicoanalizarse, hecho que todos agradecieron. Pude dar apoyo a mi familia, hacer la carrera de medicina, convertirme en psicoanalista, analista de empresas, director deportivo, escritor y hasta cantante de ópera. Y yo sólo era un jóven de 19 años vitalista, optimista, hijo de una familia de vaqueros que había heredado el negocio hundido de su familia.

domingo, 12 de julio de 2009

CUANDO LOS PENSAMIENTOS DAN MIEDO

Al no haber recibido una educación donde se incluyera una asignatura sobre el conocimiento de la mente humana, las personas son unas desconocidas frente a sí mismas. Esto quiere decir, que la mente, a veces juega malas pasadas, porque funciona de una manera que no puede ser controlada. Su funcionamiento es de 24 horas: mientras estas despierto, no para de producir pensamientos, frases, ideas, alucinaciones, fantasías y cuando duerme, produce sueños.
Toda personas alguna vez ha experimentado pensamientos o impulsos que le han asustado: coger un cuchillo y pensar en clavárserlo a un amigo, a un hijo, al padre, a la madre, al hermano. Ver una ventana o pasar por un puente y arrojarse al vacio o acercarse a los railes del metro o del tren y pensar en tirarse o empujar a alguien. Estar un lugar sagrado y tener ganas de gritar y blasfemar. Ir conduciendo y pensar en atropellar a una persona. Estar con un amigo y tener el deseo de acostarse con él sabiendo que uno tiene pareja o está casado. Entrar en un comercio y tener la idea de robar.
¿ Pensamientos comunes ?. Son pensamientos que aparecen con más frecuencia de lo que pensamos. Pensamientos que asustan y que pueden hacer perder el control debido a la intensidad y frecuencia de los mismos. Este tipo de ideas, suelen encubrir otro tipo de deseos. Digamos que ninguna madre quiere matar a su hijo, ni robar en el super, tampoco tirarse al metro o empujar a alguien a las vias del tren. Lo que es cierto, es que algún sentido tienen este tipo de ideas o pensamientos.
Cuando aparecen en la conciencia es porque en algún lugar se han generado. Este tipo de pensamientos suelen estar disfrazados y esconden algo. La manera de entenderlos es psicoanalizándolos. Porque tienen un sentido siempre inconsciente y la única manera de estar tranquilo frente a ellos es comprendiéndolos. La importancia del psicoanálisis es esta: trabajando sobre la salud mental se evita llegar a la enfermedad mental.

miércoles, 8 de julio de 2009

¿ NOS ESTAMOS PUDRIENDO ?

Todavía vivimos en un país retrasado. Mientras que en otros países como Francia, Alemania o Estados Unidos, tener un terapeuta es lo más normal del mundo, en España es algo de extraterrestres. Aquí rápido dicen que estas loco o te cuelgan un estigma para toda la vida porque alguna vez has acudido a pedir ayuda. La consecuencia es que cada día las personas se rompen con más frecuencia.
Los jóvenes en un porcentaje altísimo, están enganchado a algún tipo de droga, todo ello para soportar la vida que no saben cómo vivir y toda su frustración la disimulan bajo algún tipo de droga moderna. Vivir es difícil y en el colegio, ni si quiera en la universidad, enseñan a las personas las nociones básicas sobre cómo funciona la mente. Esto que significa, que el sistema educativo está podrido por algún tipo de interés social. Y es lógico, una manera de tener controladas a las personas es mediante la enfermedad mental. Hoy día, hasta los propios médicos, te hacen diagnósticos psiquiátricos para toda la vida y como hay intereses económicos en el uso de la medicación, pues se da medicación a todo el mundo.
De manera, que cuando alguien se enferma, se le vuelve adicto crónico al uso de la medicación. Tan impresionante es el asunto que el otro día una mujer que dijo que su hija de 16 años, se pelea mucho con ella y que es muy rebelde. Se la ocurrió llevarla al psiquiatra y le han dado tranxilium para que “ la niña esté más tranquila y sea menos hinchapelotas “. Y como este caso, puedo contar miles. ¿Entonces, de qué va todo esto? O hay un cambio en la manera de pensar los tratamientos mentales o en menos de 10 años, más de la mitad de la población española estará podrida por alguna patología mental.
Y entonces, el sistema social- el estado- tendrá que reaccionar porque un país enfermo, o una población enferma no es rentable. Y si no, que se lo digan a las empresas: cada día más bajas por depresión, ansiedad y angustia. Y los enfermos imaginarios, ¿ cuanto cuestan a la seguridad social ?. Millones. Pero paciencia, en poco tiempo, van a darse cuenta que si no incluyen el psicoanálisis en la sanidad y en la educación vamos a tener un país lleno de enfermos mentales e improductivos. ¿ Estas dispuesto a ser uno de ellos ?

domingo, 5 de julio de 2009

¿ Por qué las personas son inseguras ?

Todas las personas alguna vez sienten inseguridad ante la vida. En algunos aspectos solemos ser seguros pero en otros, inseguros. La inseguridad tiene que ver directamente con el miedo a no saber afrontar una situación y a las consecuencias negativas de la misma. La seguridad, sin embargo, es una especie de valentía que nos hace creer en nosotros mismos y en nuestras capacidades personales.

La persona insegura, no cree en sí misma pero sobre todo, tiene mucha desconfianza ante todo. Esta desconfianza le hace dudar a la hora de tomar decisiones, relacionarse con nuevas personas, ante la posibilidad de cambiar de trabajo, de pareja, de casa, etc…

La inseguridad tiene que ver también con no tolerar las situaciones nuevas. Dice el refrán que mas vale lo malo conocido que lo bueno por conocer y a esta frase, muchas personas se agarran, para no sentir el miedo, la incertidumbre o la inseguridad que producen las situaciones nuevas de la vida.
El inseguro, evita todo aquello que sea nuevo, porque al no tener seguridad no da pasos y esto es una equivocación, porque en la vida, nada se sabe hasta que no se dan los pasos. Sin embargo, muchas personas prefieren no dar pasos antes que arriesgar.

Garantías de seguridad en la vida, no hay en nada. Nadie te da seguridad de que tu pareja no te vaya a abandonar, tampoco hay seguridad de que un trabajo vaya a durar toda la vida. No hay seguridad de los años que vamos a vivir, por lo tanto, el ser humano, vive continuamente en la incertidumbre “ de no saber qué les va a pasar mañana en su vida “ y se agarra a lo seguro como a un clavo ardiendo.

Por lo tanto, se confunde inseguridad con incertidumbre. A todos nosotros, nos gustaría saber “ qué nos va a pasar en el futuro “ y eso, nadie lo sabe. Por eso mismo que LA SEGURIDAD NUNCA ES SEGURA, PORQUE CUANDO ALGO FALLA, la persona se puede derrumbar. No te esperas que tu pareja te sea infiel y se va con otra persona, no te esperas problemas en el trabajo y los tienes, no te esperas que los familiares se mueran y se mueren… etc.

Debemos aprender a vivir con la inseguridad y la incertidumbre porque forman parte de nuestras vidas y lo único seguro en la vida es que todos nos vamos a morir. Por lo tanto, si de vivir se trata, mejor apostar por la vida y aprovechar y buscar las oportunidades y las cosas buenas que la misma tiene.